El cáncer de mama es la primera causa de muerte por cáncer en la mujer, para la mayoría de las personas no fumadoras los factores de riesgo modificables más importantes son: el peso corporal, la alimentación y actividad física.

Por: Mercedes Rodríguez

El cáncer de mama es la primera causa de muerte por cáncer en la mujer, para la mayoría de las personas no fumadoras los factores de riesgo modificables más importantes son: el peso corporal, la alimentación y actividad física.

Sin embargo, la mayoría de las investigaciones sobre el efecto preventivo de los alimentos sobre el cáncer concluyen que ningún alimento por si solo tiene propiedades preventivas, más bien, el trabajo en conjunto de diversos componentes alimentarios (nutrimentos) otorgan herramientas al organismo para afrontar condiciones diversas. Así que una dieta balanceada (sin excluir grupos de alimentos) y variada (diferentes alimentos de cada grupo) será la mejor estrategia para lograr este objetivo, aquí te compartimos algunas recomendaciones que podrás incluir en tu día a día:

  • Incluye 5 o más verduras y frutas al día: algunas investigaciones concluyen que el consumo suficiente de alimentos vegetales podría reducir hasta un 40% el riesgo de cáncer.
  • Suma otros alimentos vegetales a tu alimentación como: cereales (harinas) integrales, nueces, almendras y leguminosas; todos los días.
  • Infórmate y consume fitonutrientes, componentes provenientes de alimentos vegetales que se han asociado con disminución de sustancias y acción de los elementos cancerígenos. Algunos nombres de los fitonutrientes son: betacaroteno, resveratrol, isotiocianatos, antocianinas y otros.
  • Cantidades adecuadas de omega 3 en tu alimentación, pueden tener un efecto protector de cáncer. El omega 3 lo puedes encontrar en altas concentraciones en pescados como salmón, sardinas, atún y bacalao y en menor concentración en algunas nueces y la linaza. Asegúrate de consumir alguna de estas opciones, al menos, tres veces por semana.
  • Si consumes carnes procesadas y/o ahumadas (salchicha, jamón, tocino y otros) con frecuencia, comienza por disminuir las cantidades y posteriormente la frecuencia.
  • La calidad de los alimentos (origen de los ingredientes) importa más que las calorías, en general prefiere comida preparada de manera más casera y disminuye la frecuencia de los alimentos de preparación rápida o instantánea. Dedícale tiempo a tus preparaciones.
  • Elige tu dosis de azúcar al día y busca el sabor natural de los alimentos.
  • No consumas suplementos ni hagas prácticas extremas de alimentación que no sean sostenibles a mediano y largo plazo, sin supervisión de un profesional de la salud.

La nutrición es importante para todas las personas y en conjunto con la practica regular de actividad física; ayuda al cuerpo para mantenerse fuerte y saludable.